Cristina Mesquita. Primer premio fotografía 2008 |
El cono de aprendizaje de Edgar Dale
No hacía mucho había estado leyendo acerca de técnicas para favorecer el aprendizaje y recordaba que había visto en alguna publicación una "pirámide del aprendizaje". Rebuscando entre mis notas lo encontré, la pirámide de aprendizaje de Edgar Dale. Parecía interesante, si esto era cierto tal vez había formas para facilitar el aprendizaje. "Methods for Analyzing the Content of Motion Pictures" publicado en 1932, propone una lista de conceptos. En 1946 publica el "Cone of Experience" cuya tercera y última edición incluye este cono que en ningún caso lleva asociados números o porcentaje alguno.Falso cono de Edgar Dale |
Para el que quiera profundizar como llegaron los porcentajes a la primera ilustración, les propongo lean el artículo de Will Thalheimer, People remember 10%, 20%...Oh Really?
Como él dice en su artículo:
Actualmente, muchas personas asocian los porcentajes falsos con el "Cono de la Experiencia" de Dale, desarrollado en 1946 por Edgar Dale. Esto proporciono un modelo intuitivo de la concreción de diversos medios de comunicación audiovisuales. Dale no incluyo ningún número en su modelo y no se empleó investigación alguna para generarlo. De hecho, Dale advirtió a sus lectores que no tomaran el modelo al pie de la letra. (traducción libre)
Traducción del verdadero cono de Dale |
Una historia reciente
Pero leer a Will Thalheimer me llevó a plantearme un enfoque diferente. La gente como él, investigadores, profesores, educadores, llevan toda una vida dedicada a entender los procesos de aprendizaje y como mejorarlos. Por otro lado parecía que en Estados Unidos hacía tiempo que como nosotros estaban preocupados por los resultados académicos. No tarde en encontrar un artículo revelador de Elizabeth Green, en la revista de The New York Times, "Building a Better Teacher". En él, Elizabeth Green, escribe de las experiencias de un gran número de investigadores, profesores y educadores, pero se centra en Doug Lemov y sus investigaciones que luego dieron lugar a su libro "Teach Like a Champion" muy popular entre la comunidad educativa en E.E.U.U. El artículo fue publicado el 2 de marzo de 2010. Elizabeth Green cuenta como cinco años atrás Doug Lemov se encontraba en una encrucijada, tras una exitosa carrera como profesor y director de escuela, estaba trabajando como consultor para escuelas con problemas, un gran número al parecer, inmersos en la aplicación de la ley NCLB. No era una cuestión económica, el presidente Bush había dotado a la ley de un billón de dolares y esta estaba generando una ingente cantidad de datos gracias a toda una serie de pruebas estandarizadas y procedimientos de seguimiento.Notas de Prensa. White House photo by Paul Morse. 08/01/2002 |
Pero sigamos con Doug Lemov y sus preocupaciones que será mas productivo. Aquel invierno, mientras se dirigía de una escuela a otra, tenía la sensación de que había algo que se le escapaba. Había realizado una visita especialmente deprimente a una escuela de Siracusa. En ocasiones a Lemov le basta con cruzar la puerta del aula para saber cual era el problema, pero este no era el caso. Los resultados académicos habían caído tan bajo que los administradores estaban preocupados porque el estado pudiera cerrar la escuela. Pero los profesores parecían preocuparse por sus alumnos. Se sentaban en el suelo con ellos mientras recogían y leían las actividades que les habían encargado. Las clases eran pequeñas. La escuela funcionaba bajo rigurosos estándares académicos, currículos de última generación y se empleaba un software para analizar los resultados de cada estudiante, determinando sus fortalezas y debilidades sobre las que debían trabajar.
Pero cuando llego el momento de la docencia real, la tarea diaria de lograr que los estudiantes aprendieran, la escuela fracaso.Los estudiantes desobedecían las indicaciones de los profesores, las discusiones en clase se apartaron de los planes de estudio. En una clase, Lemov observo que un profesor se paso varios minutos discutiendo con un alumno acerca de por qué no tenía un lápiz. En otra, se dividió la clase en dos grupos para que practicaran juntos la multiplicación, al poco observó que en su lugar estaban realizando la tarea mas interesante de charlar y solo un estudiante seguía en solitario con los ejercicios. Mientras Lemov volvía a casa desde Siracusa, reflexionó sobre su papel en todo esto. Sabía cómo aconsejar a las escuelas a adoptar un mejor plan de estudios o elevar los estándares o desarrollar mejores canales de comunicación entre los maestros y directores. Pero se dio cuenta de que no tenía ni idea de cómo aconsejar a las escuelas acerca de su rol principal: cómo enseñar.
La búsqueda de la excelencia
La ley NCLB, había generado un mar de datos por todo el país y estos se emplearon para buscar correlaciones entre todos los posibles factores de control. Tras realizar todo tipo de análisis, encontraron que todos ellos producían cambios muy pequeños en los resultados salvo uno. El profesor asignado a una clase o alumno era determinante en los resultados. Los profesores que trabajaban en el mismo edificio, para igual grado, producían resultados muy diferentes. Entonces se puso énfasis en mejorar la dedicación de maestros, profesores y educadores por medio de incentivos económicos. También se oyeron voces que pedían una renovación del cuerpo docente. Lemov, defensor de las fuerzas del mercado creía que los incentivos por si solos no iban a ser suficientes. Entonces, ¿Que es lo hace a un profesor ser mejor que otros?Lemov, en su búsqueda de los ingredientes mágicos que convertía a algunos en mejores maestros, se encontró con algo inesperado: lo que intuitivamente parecía una aptitud innata con frecuencia no era sino la aplicación de una técnica deliberada.Pero Lemov no fue el primer educador en llegar a la conclusión de que los profesores necesitan una mejor capacitación, tal vez si fuera uno de los primeros que sistemáticamente se ha empleado a fondo en observar y anotar cuales eran las diferencias que distinguían a unos de otros y en elaborar técnicas que pudieran ser aprendidas y reproducidas para obtener resultados similares.
El argumento central de Lemov es la creencia de que los estudiantes no pueden aprender a menos que el maestro logre captar su atención y conseguir que sigan sus instrucciones. Lo que se denomina la "gestión del aula", levantará muchas voces discordantes. Muchos entenderán que una clase enfocada en las reglas y el orden solo replicará las estructuras de poder, pero viendo el material recopilado por Lemov no cabe duda que la "gestión del aula" es fundamental.
No se si esta será la solución a los bajos rendimientos en nuestras aulas pero esta claro que un profesor necesita de todas las herramientas a su alcance para conseguir su misión que no es nada fácil, que sus alumnos aprendan. Y para esto no solo es necesario dominar la materia que se quiere enseñar. Hay algo mucho mas sutil en el proceso de comunicación entre maestro y alumno. No hay duda que nuestros profesores necesitan de toda la ayuda posible y que en eso todos estamos implicados, los primeros, los padres.
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