QUE EN ESTA NAVIDAD EL CONSUMISMO NO NOS CONSUMA
Es mucho lo que los medios de comunicación publican
sobre la Navidad, tal pareciera que les interesa presentar el nacimiento de Cristo
como un acontecimiento único, especial para la humanidad. ¿Es ese su interés?
Por supuesto que no, la gran mayoría se refieren a la Navidad invitando al
consumo de aquello que no necesitamos y luego para muchos se vuelve una
necesidad y cuando no se obtiene, una tragedia o una verdadera desgracia.
Cristo
nació en medio de la extrema pobreza y la humildad propia de su nacimiento, que
recordamos en los pesebres que se hacen en muchos lugares.
En
sí, el intercambio de regalos con amor es algo positivo que despierta
sentimientos hermosos en quien los comparte; pero caer en el juego de las
campañas publicitarias de la dictadura del mercado, es lo que le quita el
sentido a la Navidad como una expresión de fe en el Dios encarnado en nuestra
historia humana que nos trae la Salvación.
No
más consumismo innecesario en esta Navidad; sí un compartir regalos con amor
cristiano, con Fe profunda en Aquél que me envía a compartirlo con el más
necesitado; sí descubrir en el pobre al Cristo sufriente que viene a nosotros
pidiendo ayuda y una respuesta de amor solidario. Por tanto, no todo está
perdido, la auténtica Navidad puede renacer en nuestros corazones cuando
valoremos en familia, en comunidad, el nacimiento de Cristo que nace en
nuestros corazones y celebramos cada año en el día de Navidad.
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